Madrid 659 706 618 | León/Asturias 659 115 313 | Cantabria/Bizkaia 650 425 213 info@losdeshollinadores.es

Cómo encender la chimenea después de un tiempo sin usar

por Gerard | Sep 19, 2019 | Chimenea | 0 Comentarios

Parece mentira lo rápido que pasa el tiempo –sobre todo cuando se disfrutan los días de descanso estivales– pero el otoño está aquí.

Y el tiempo más desapacible está comenzando a invitar a pensar…

Encender la chimenea es una opción

Sobre todo porque, tras un tiempo sin habitar nuestra segunda residencia el calor de hogar brilla por su ausencia.

Algo que puede resultar incluso un freno a la hora de convencer a la familia para pasar el fin de semana en el campo.

De hecho, sabemos por experiencia que prender la lumbre es una de las primeras tareas al llegar al chalé o la casa de campo, con el fin de que vaya “entrando en calor” antes de la caída de la tarde.

El calor del hogar

Llega la temporada

Y es que la mera mención del mal tiempo –y no digamos de la nieve– trae al instante a la imaginación un fuego cálido y crepitante, junto al que poder relajarse con los seres queridos, mientras afuera sopla el viento helado…

Sin embargo, antes de encender la chimenea por primera vez en meses.

Antes incluso de colocar troncos, piñas… es preciso detenerse un instante y preguntarse

¿Puedo usar mi chimenea tal cual la dejé al llegar la primavera?

Y no es en absoluto una mala pregunta.

Nos puede parecer una tarea sencilla: se enciende una cerilla y todo listo, ¿verdad?

Pues no tanto.

Porque si lo que se pretende lograr es un fuego confortable, que dure más de unos minutos, no llene la casa de humo y resulte seguro, la verdad es que conviene seguir los consejos de un deshollinador profesional sobre cómo encender una chimenea después de un tiempo sin usar.

Qué nos podemos encontrar

Después de todo, ha estado inactiva durante una buena parte del año.

Aves, insectos e incluso las ardillas probablemente han entrado y salido de la chimenea en no pocas ocasiones durante el buen tiempo.

Seguro que ya se habrán escabullido por la parte superior, a buen seguro que han dejado “rastros” de su paso que es preciso deshollinar antes de prender la lumbre de nuevo.

Además, basta con pensar que el clima ha pasado de temperaturas de congelación al agobiante calor veraniego, insoportable a ciertas horas del día en las que el sol castiga los ladrillos del tejado del que sobresale la chimenea, y en breve el frío va a volver nuevamente a congelarlos, lo que ejerce una presión invisible que los deteriora poco a poco.

Las recomendaciones del deshollinador

De modo que, con tantos elementos a considerar es bastante razonable pensar que conviene realizar ciertas comprobaciones, antes de encender la chimenea al comenzar la temporada, y después de un tiempo sin hacerlo, para estar seguros de que todo va a funcionar correctamente.

No sin antes inspeccionarla

En realidad, se puede llevar a cabo una simple inspección de la chimenea sin la ayuda de un deshollinador.

En primer lugar, deberás subir al tejado e inspeccionar la tapa de la chimenea, para asegurar que esté libre de restos o escombros, ocasionados por el clima cambiante, y de cualquier otra obstrucción.

Pero no te arriesgues: si tu tejado es muy alto (el chalé tiene más de un piso) o su ángulo es muy empinado, mejor acude a un profesional en busca de ayuda.

¿Tienes las herramientas adecuadas?

Cuando estés allí arriba, retira la tapa de la chimenea e inspeccione el interior del conducto con una linterna.

Estás buscando una acumulación de creosota, ese subproducto de la quema de madera del que ya te hemos hablado en otras ocasiones, que podría incendiarse al prender la lumbre y entrar en contacto de nuevo con un fuego vivo.

Quitar y reemplazar una tapa de la chimenea implica emplear una serie de materiales sobre los que sí que te recomendamos ayuda de un deshollinador, acostumbrado a llevar a cabo esta tarea a menudo.

La accesibilidad es importante

Y si hay ramas de árboles que cuelgan relativamente cerca de la chimenea exterior también es conveniente limpiarlas antes de usar la chimenea.

Una vez más, el profesional tiene a su alcance las herramientas necesarias.

También es necesario inspeccionar la chimenea en busca de grietas y de otros problemas estructurales, que puedan haber tenido lugar –sin que nadie en tu casa lo vea– durante los meses en los que no es necesario encender la chimenea, ya que pueden llegar a provocar incendios.

Un profesional está preparado

En este sentido, un buen profesional podrá asesorarte sobre los compuestos sellantes existentes, resistentes al agua y que además son lo suficientemente flexibles para aguantar esos ciclos de expansión y contracción que te hemos contado.

servicio-deshollinado-con-camara-endoscopica-losdeshollinadores

Y para su aplicación será necesario limpiar adecuadamente las superficies, eliminando cualquier presencia de moho u hongos.

Antes de encender la chimenea

El siguiente paso es inspeccionar el regulador de humos que ajusta el “tiro”, ese dispositivo que permite retener el calor dentro del hogar cuando no está el fuego encendido, y permite, sin embargo, que el humo salga de la casa cuando arde un fuego cálido y prometedor en la chimenea.

Estos amortiguadores de humos están en el interior de la chimenea y en su parte superior, por lo que tendrás que verificar que su función de apertura/cierre marcha correctamente.

Comprobando el regulador de humos

El regulador del “tiro” debe abrirse por completo si funciona como es debido. Si no lo hace es necesario arreglarlo antes de encender la chimenea.

Desde el nivel del suelo, debe poder mirar hacia arriba a través de la chimenea y ver la luz del día cuando el regulador está abierto.

No obstante, es bueno verificar su movimiento con una linterna, para asegurarse.

Verificar el hogar

Entendiendo por tal todo el área donde se colocan los troncos de madera y las piñas, paja seca o papel que sirve para que el fuego prenda y queme poco a poco la leña.

Inspeccione con cuidado los mismos elementos que buscaba en el conducto interior de la chimenea: asegúrese de que no haya acumulación de creosota y busque ladrillos o mortero rotos en mal estado.

Un consejo que sí le damos es que puede ser útil deshollinar la cámara de combustión primero, previo de la inspección, dependiendo de cuánto hollín haya acumulado.

Y si el hogar está limpio, y ha revisado el regulador para asegurarse de que la mayor cantidad de humo suba por la chimenea y no entra a la casa, llega el momento de inspeccionar la zona adyacente

Particularmente durante las vacaciones estivales, en las que se pasa más tiempo seguido en la segunda residencia, es fácil que decoraciones, muebles y otros elementos se acerquen en exceso al hogar cuando llegar de nuevo el momento de volver a encender la chimenea.

Deje el mayor espacio posible entre éste y cualquier papel, madera u otro material combustible.

No menos de metro y medio; aunque cuanto más, mejor.

Ojo, por ejemplo, con los cubretiestos o las esterillas de mimbre, esparto o tela, puesto que son inflamables.

Deshollinar con regularidad

¿Tiene instalado –o ha pensado alguna vez en ello– un detector de humo y monóxido de carbono combinado?

Detector de humo

Nunca está de más, y por su precio merece de verdad la pena.

Pues bien, una de las cosas más importantes al realizar las verificaciones de seguridad previas a encender la chimenea es asegurarse de éste funcione como es debido.

En caso de instalar solo uno, es mejor tenerlo en la misma habitación que la chimenea, ya que es allí donde el monóxido de carbono puede convertirse en un peligro.

Tenga uno o más, si sospecha que no funciona correctamente, y no olvide cambiar las baterías.

Y recuerda no quemar nada, excepto leña, en su chimenea.

Ya que, como te hemos explicado en otra ocasión, otros materiales a menudo contienen productos químicos tóxicos para la salud.

Y finalmente, no acostumbres a quemar demasiada leña.

Llenar en exceso el hogar puede provocar una mayor acumulación en la chimenea, lo que puede contribuir a esa intoxicación por monóxido de carbono que trata de evitar precisamente el detector.

Resumiendo

Hemos repasado todos los elementos a inspeccionar antes de encender una chimenea que lleva tiempo sin usarse.

Pero ya sabes que siempre recomendamos deshollinar periódicamente, sobre todo tras la temporada de mayor empleo.

Dejar a punto los conductos, la cámara de humo, el regulador… ayuda a que la combustión sea más eficiente, ahorrando en leña, y proporcionando un delicioso calor de hogar.

Encontrarás más detalles sobre nuestros servicios en nuestra página de servicios.

DESCUBRE ALGUNOS DE NUESTROS SERVICIOS

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.